El
26 de Febrero de 1969, esta poesía la recitó Gerardo Diego siendo miembro de la Real Academiala Lengua en el homenaje que
se hizo a Ramón Menéndez Pidal en el Ateneo de Madrid, recordando así la visita
que con él realizó a Ruiloba el 31 de julio de 1930 para contemplar el Baile a
lo Llano.
Romance viejo bailado
de la Condesa de Lara,
romance
que vi en Ruiloba
los ojos llenos de lágrimas.
Rondas de los bailadores,
rubores de las muchachas.
Y los versos del romance
fluyen como el agua mansa.
Cuando después de hinojarse
y cortejar con mudanzas,
la niña pone su mano
en la cabeza postrada,
y el baile se ancha y se anima
y el donaire de las sayas
se entrecruza con el brío
de las varoniles ansias.
Todo el corro gira y crece,
seis siglos entran en danza
y los versos del romance
cantan como el agua clara.
No mueras, viejo romance,
el de la boda estorbada,
romance que ví en Ruiloba,
los ojos llenos de lágrimas.
Ramón Menéndez Pidal y su hija Jimena, a la derecha, contemplando el baile del conde de Lara
No hay comentarios:
Publicar un comentario